La batalla de Belasitsa tuvo lugar en el 1014 y enfrentó al emperador bizantino Basilio II contra un ejército de guerreros búlgaros. La victoria correspondió a Basilio, que además hizo gran cantidad de prisioneros, su crueldad fue extrema pues, dejó ciegos a 15.000 de ellos y tuertos a uno de cada cien para que pudiesen llevar de vuelta a su casa a sus compañeros.